Clasificación de los desinfectantes

Las sociedades científicas (SEDE-Sociedad Española de Desinfección y Esterilización y la SEMPSPGS-Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública y Gestión Sanitaria) han elaborado un comunicado que resumimos a continuación.

Ambas sociedades desean manifestar su profunda preocupación ante la persistencia de deficiencias estructurales y operativas en el reprocesado de productos sanitarios en numerosos centros sanitarios del país, tanto del ámbito público como privado. A pesar de las reiteradas advertencias y documentos de consenso, observamos con preocupación que las prácticas deficientes en higiene, desinfección y esterilización siguen siendo una realidad frecuente en nuestros centros.

Los productos desinfectantes, en función de su finalidad prevista, se encuentran sujetos a diferentes regulaciones, y éstas deben estar indicadas tanto en su etiquetado como en las instrucciones de uso. Hay tres categorías legales bajo las cuales puede comercializarse un desinfectante:

  • Biocidas: antisépticos para piel sana y desinfectantes de ambientes clínicos y quirúrgicos.
  • Medicamentos: antisépticos de piel dañada.
  • Productos sanitarios: productos para la desinfección de productos sanitarios

Los productos biocidas que son competencia de la AEMPS son los denominados tipos de producto (TP) 1 y 2 que deben estar registrados conforme al Real Decreto 3349/1983, y llevan marcado DES-AEMPS. Los TP 1 son biocidas para la higiene humana, es decir, antisépticos de piel sana. Los TP 2 son desinfectantes de ámbito sanitario y están destinados a la desinfección de superficies, materiales, equipos y muebles de ámbito clínico-quirúrgico, pero no para el reprocesado de material sanitario. Los antisépticos destinados al campo quirúrgico preoperatorio y a la desinfección del punto de inyección son considerados medicamentos en lugar de biocidas, en virtud de la Resolución de 2 de junio de 2021 de la AEMPS.

Los productos que están destinados específicamente para la limpieza, desinfección o esterilización de productos sanitarios se consideran productos sanitarios y deben cumplir con la legislación que les resulta de aplicación, el Reglamento 2017/745 sobre los productos sanitarios y, en España, el Real Decreto 192/2023, que distingue entre diferentes clases en función del riesgo asociado a su uso:

Clase Características principales Ejemplo relacionado con detergentes
I Bajo riesgo. Productos que no entran en contacto directo con el paciente o solo con piel intacta. Detergentes para limpieza de productos no invasivos. Son autocertificados por el propio fabricante, por lo que no constan en el registro de comercialización de la AEMPS
IIa Riesgo medio. Incluye productos que entran en el cuerpo por orificio corporal o quirúrgicamente, pero no permanecen. Detergentes/desinfectantes para productos no invasivos*.
IIb Riesgo medio-alto. Detergentes/desinfectantes para productos invasivos*.
III Alto riesgo. Productos implantables o que entran en contacto con el sistema nervioso central o circulatorio central. No suelen aplicarse a detergentes/desinfectantes.

El fabricante es el responsable de incluir el marcado CE del producto, acompañado del número de identificación ON, tras haber llevado a cabo una evaluación de su conformidad con los requisitos de seguridad y funcionamiento que establece la legislación. En este momento, no existen listados de productos sanitarios, por lo que no tenemos una relación de productos autorizados para la limpieza y desinfección de productos sanitarios.

Un producto sanitario es todo instrumento, dispositivo, equipo, programa informático, implante, reactivo, material u otro artículo destinado por el fabricante a ser utilizado en personas, por separado o en combinación, con alguna de las siguientes finalidades médicas específicas:

  • Diagnóstico, prevención, seguimiento, predicción, pronóstico, tratamiento o alivio de una enfermedad.
  • Diagnóstico, seguimiento, tratamiento, alivio o compensación de una lesión o de una discapacidad.
  • Investigación, sustitución o modificación de la anatomía o de un proceso o estado fisiológico o patológico.
  • Obtención de información mediante el examen in vitro de muestras procedentes del cuerpo humano, incluyendo donaciones de órganos, sangre y tejidos.

Las sociedades científicas firmantes quieren alertar a la comunidad sanitaria sobre un problema grave, extendido y, sin embargo, invisibilizado en la práctica clínica, como es el uso incorrecto de detergentes enzimáticos como si fueran desinfectantes o esterilizantes, especialmente en procesos de reprocesamiento de instrumental médico. Este error representa un riesgo para la seguridad de los pacientes y los profesionales, y refleja fallos estructurales en la formación, supervisión, regulación y cultura de seguridad. Esto puede ser aún más acusado en hospitales, clínicas y centros sanitarios donde no existe la figura de Medicina Preventiva y Salud Pública o una enfermería especializada en este campo. Estas tareas, que pueden considerarse básicas o que se dan por supuestas, hacen que se utilicen de un modo incorrecto los productos sanitarios de reprocesamiento de material.

Tampoco se realiza de un modo correcto la desinfección de alto nivel de fibroscopios nasales o ecógrafos y sondas intracavitarias (vaginales, rectales, transesofágicos). Son productos sanitarios, por lo que para su tratamiento y reprocesado debemos usar un producto sanitario.

La AEMPS ha emitido una serie de recomendaciones dirigidas a hospitales y comunidades autónomas en relación con la clasificación, etiquetado e indicaciones de uso de productos sanitarios destinados a limpieza, desinfección y esterilización. No obstante, reiteramos que tales medidas deben ir acompañadas de acciones estructurales.

Desde SEDE y SEMPSPGS instamos a las autoridades sanitarias y a los responsables de los centros a:

  1. Implementar protocolos nacionales estandarizados, alineados con la normativa vigente, para cada etapa del reprocesado de los productos o dispositivos sanitarios.
  2. Garantizar una formación reglada, continuada y acreditada por sociedades científicas, dirigida al personal responsable de las tareas de reprocesamiento de productos sanitarios (tanto personal de enfermería como Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería), estableciendo su obligatoriedad para poder desempeñar dichas funciones, así como para asumir responsabilidades en la dirección de las centrales de esterilización y reprocesamiento de productos sanitarios.
  3. Reforzar la inspección y auditoría técnica de los procesos de reprocesamiento en centros sanitarios públicos y privados. Es urgente y necesario profesionalizar, normalizar y supervisar esta parte crítica de la seguridad asistencial.
  4. Actualizar los criterios de compra hospitalaria, priorizando productos con compatibilidades validadas, etiquetado completo y cumplimiento de los reglamentos europeos.

Consideramos que la desinfección y la esterilización conforme a las instrucciones de reprocesado de productos sanitarios debe ser un área de mejora inmediata a nivel nacional que tenga todas las garantías de llevarse a cabo con formación suficiente, recursos humanos e inspección a todos los establecimientos sanitarios a los que competa, tanto públicos como privados. Recordamos que 1 de cada 12 personas ingresadas en nuestros hospitales contrae una infección relacionada con la atención sanitaria, algunas pueden ser consecuencia de reprocesamientos incorrectos, frecuentemente invisibles y de efectos potencialmente letales.

El reprocesado de productos sanitarios debe dejar de ser una tarea relegada y delegada, y convertirse en un compromiso institucional, técnico y ético ineludible.

Resolviendo dudas con los contenedores (sin filtro y con filtro) y Guía para la validación de los procesos de embalaje según ISO 11607-2

Resolviendo dudas con los contenedores (sin filtro y con filtro) y Guía para la validación de los procesos de embalaje según ISO 11607-2

En el reciente congreso de la WHSS en Chile se presentó la «Guía para la validación de los procesos de embalaje según ISO 11607-2» (se descarga en este link y es gratis), y es que hay validar el proceso de envasado. Se trata de uno de los puntos clave de la central de esterilización. La confirmación de la conformidad con las normas según ISO 11607-1 y las partes correspondientes de la serie de normas EN 868 también forma parte de la evidencia reglamentaria que deben proporcionar los fabricantes de sistemas de barrera estériles. Hay un sistema de colores para diferenciar los diferentes tipos de embalaje y envasado. Y algo que dicen al principio: «Las personas que realicen los trabajos deberán acreditar que cuentan con conocimientos y experiencia en el área de validación de procesos. La prueba de los conocimientos requeridos se puede acreditar, por ejemplo, participando en el curso de validación AEMP de la DGSV».

Y tampoco viene mal revisar los símbolos de envasado, y aquí en castellano.

¿Qué influencia tiene el tiempo de secado en la eliminación de residuos de sangre durante el reprocesamiento de dispositivos médicos? El autoclave (wordpress.com)

¿Qué influencia tiene el tiempo de secado en la eliminación de residuos de sangre durante el reprocesamiento de dispositivos médicos?

El lavado del instrumental es uno de los aspectos claves de un buen reprocesamiento. Hay veces que nos quedan manchas, esas manchas afectan al instrumental que afectan a su funcionalidad, tenemos controles de lavado, y existen guías sobre el tema. Pero ¿Cuánto podemos esperar a tratarlo y procesarlo desde que finaliza la intervención?

Al procesar instrumentos quirúrgicos después del uso, una de las tareas más importantes es la eliminación segura y sin residuos de sangre y contaminaciones que contienen sangre. Existen recomendaciones de diversos grupos de trabajo sobre el tiempo ideal para la limpieza de los instrumentos utilizados con el fin de garantizar una desinfección y esterilización seguras y evitar efectos adversos. Por lo general, estas recomendaciones se basan principalmente en la experiencia práctica y existen pocos trabajos sistemáticos sobre el tema.

Con esto en mente condujimos varias series de experimentos en el laboratorio de Investigación y Desarrollo e Innovación de la Fábrica Química Dr. Weigert con el propósito de evaluar cuales son los verdaderos efectos de diferentes tiempos de secado en la dificultad de eliminar la sangre de dispositivos médicos. Se realizaron experimentos de inmersión con placas de acero inoxidable previamente contaminadas con sangre de oveja después de diferentes intervalos de secado en condiciones ambientales. Esas placas contaminadas permiten resultados reproducibles, ya que cantidad y distribución de la sangre en la superficie metálica son idénticas para cada muestra. Los parámetros temperatura, dosificación y tiempo de inmersión también se mantuvieron constantes en todos los experimentos usando el detergente alcalino-enzimático neodisher® MediClean advanced. La evaluación de los resultados de limpieza se realizó con cuatro métodos diferentes, tanto espectroscópicos como visuales, analizando los residuos de proteínas que quedaron en las placas.

Descubrimos que la sangre durante el proceso de secado es especialmente difícil de eliminar en las primeras 1-2 horas. En esta fase, en la que la sangre está ya coagulada pero aún no se ha secado completamente, quedaban muchos más residuos proteicos en las muestras que después de tiempos de reposo más largos o al inicio, directamente después de la preparación de las placas.

Resumen de los resultados experimentales: se muestran las medias aritméticas de todas las determinaciones individuales para los cuatro métodos en función del tiempo de secado

Llegamos a la conclusión de que existe un periodo de tiempo para la eliminación de los residuos de sangre en el que se pueden esperar unos resultados de limpieza óptimos. En consecuencia, también hay tiempos de reposo que no son favorables para el reprocesamiento. Basándose en los datos experimentales de nuestro estudio, se dedujo que cuando se trata de residuos superficiales este tiempo óptimo se encuentra directamente después de la contaminación o en el intervalo de > 3 h y < 24 h tras la contaminación [La negrita es mía].

Estos resultados sin embargo se basan exclusivamente en las placas contaminadas con sangre utilizadas en este estudio, que, debido a su geometría simple, permiten conclusiones principalmente sobre la contaminación superficial. Para poder trasladar los resultados a instrumentos quirúrgicos más complejos, con articulaciones, canales, cavidades u otros elementos de difícil acceso, serían necesarios más experimentos en condiciones más realistas. Lo mismo aplica a los diferentes materiales y texturas de superficie que se encuentran frecuentemente en el contexto del reprocesamiento de dispositivos médicos y que pueden interactuar de formas diferentes con la sangre y, por tanto, también influir el resultado de la limpieza. Además, en el estudio solamente se utilizó sangre como contaminante. Sin embargo, si los residuos que hay que eliminar son una mezcla de sangre y otros componentes, como por ejemplo mucosidad, la comparabilidad con los resultados aquí presentados podría ser limitada.

Los datos obtenidos en el estudio demuestran una vez más que el reprocesamiento del instrumental quirúrgico es un tema muy complejo y que numerosos aspectos en este contexto aún no se han investigado lo suficientemente en detalle. Además de los esfuerzos por optimizar continuamente los procesos y procedimientos, los métodos de prueba y los productos químicos usados para la limpieza y desinfección, también es esencial el estudio detallado de los principios científicos, que puede ayudar a comprender mejor los problemas que surgen durante el reprocesamiento en la aplicación práctica.

 

¿Qué es esto de la trazabilidad? – El autoclave (wordpress.com)

En la central de esterilización se sabe que es imprescindible realizar una completa y correcta trazabilidad de los productos. Pero, ¿sabemos realmente qué es la trazabilidad y por qué es tan importante como se dice en los centros sanitarios?

La trazabilidad se define de formas diferentes en función de la normativa que consultemos, por ejemplo:

  • UNE 66.9.1-9.2: “capacidad para reconstruir el historial de la utilización de un artículo o un producto mediante una identificación registrada”
  • UNE EN ISO 9000: “capacidad para seguir la historia, la aplicación o la localización de todo aquello que esté bajo consideración
 

Aplicando el concepto de trazabilidad en el ámbito sanitario, aplicado al material estéril que es procesado en las centrales de esterilización, la trazabilidad es la capacidad de conocer todos los pasos que éste ha seguido, desde que se utiliza en una intervención con un paciente, hasta que vuelve a estar estéril listo para su utilización con otro paciente ¡Ojo! esta reconstrucción del histórico del material estéril es posible sólo si existe una identificación única del mismo. De esta manera, podemos tener la seguridad de que se ha reprocesado correctamente.

Pero no sólo es seguridad lo que puede aportarnos el conocer todas las fases por las que pasa el material quirúrgico, al personal sanitario que lo manipula y a nuestros pacientes, sino que existen otros motivos que justifican la importancia de la trazabilidad desde un punto de vista normativo.

Puesto que el proceso de esterilización es un “proceso especial” (tras el que no se puede comprobar el resultado final), requiere un control en todas las etapas de producción, como garantía de seguridad del proceso, así como la trazabilidad del mismo.

Además, según el RD 192/2023, es de obligado cumplimiento tanto para los fabricantes de productos sanitarios estériles como para las centrales de esterilización disponer de:

  • un sistema de gestión de la calidad capaz de garantizar el correcto estado de los productos y la ejecución de los procedimientos y controles procedentes
  • instalaciones, procedimientos, equipamiento y personal adecuados
  • un sistema de archivo para almacenar la documentación generada con cada producto y mantenimiento de un registro de todos los productos que permita garantizar la trazabilidad de los mismos

Es por todo esto que realizar una correcta trazabilidad del material estéril que se está utilizando en las intervenciones a los pacientes es imprescindible para garantizar que su reprocesamiento ha sido completo y correcto, pero también para asegurar que los procedimientos de trabajo asociados a éste cumplen con la normativa y los estándares de calidad vigentes.

Una correcta trazabilidad, por tanto, es garantía de un control de procesos documentado en la central de esterilización, y fundamentalmente:

  • Garantiza la esterilidad y seguridad de uso de un paquete, por lo que…
  • Aporta seguridad al paciente y el personal sanitario, y porque además…
  • Posibilita la detección de un problema y la limitación de su extensión
 

Ventajas de una trazabilidad informatizada

La trazabilidad puede realizarse de forma manual, pero cada vez es mayor la tendencia al uso de un software especializado, por las ventajas adicionales que nos aporta:

  • Permite estandarizar la documentación
  • Aumenta la seguridad de los procesos
  • Agiliza el análisis de datos
  • Facilita la gestión del inventario
  • Facilita la gestión de la calidad
  • Posibilita la optimización de procesos

La documentación estandarizada de las distintas fases del reprocesamiento del instrumental quirúrgico que supone un sistema informático de trazabilidad, aporta seguridad a los procesos garantizando que quedan documentados correctamente, al menos, los datos necesarios para su registro y validación.

Además, el registro de posibles incidencias detectadas en los distintos procesos, permite crear una base de datos para el análisis de no conformidades. A partir de esta información, se pueden llevar a cabo acciones correctivas e implementar planes de mejora.

Por otro lado, la trazabilidad informatizada permite conocer la ubicación en tiempo real y el contenido de las cajas sin necesidad de abrirlas, lo que facilita la selección de cajas con un contenido concreto y necesario para una cirugía. También permite optimizar los tiempos de espera en la solicitud de material, evitando, a su vez, la mala gestión de recursos que supone la apertura de cajas que finalmente no se llegan a utilizar en el quirófano. De esta forma, se mejora no sólo la productividad de las tareas de reprocesamiento del instrumental, sino también la seguridad en la actividad quirúrgica.

Además, una correcta trazabilidad informatizada permite la gestión y explotación de datos de una manera rápida y sencilla. La posibilidad de extracción de datos y generación de informes facilita su análisis y permite el estudio de los distintos procesos y recursos del centro, dando pie al planteamiento de planes de mejora y optimización.

Importancia de la gestión y trazabilidad del instrumental

Al respecto de la trazabilidad, la informatización de los registros del reprocesamiento del instrumental y la correcta identificación del material estéril, ayudan a cumplir de una forma sencilla y ágil con la normativa.

Los sistemas informáticos especializados permiten la identificación única de los paquetes estériles para asegurar la trazabilidad del material, así como la gestión del instrumental quirúrgico de manera individualizada si está identificado de forma única.

La identificación única del instrumental quirúrgico ofrece otras muchas ventajas adicionales a la trazabilidad que merece la pena valorar.

En definitiva, la implementación de un sistema informatizado de Trazabilidad del Instrumental en un centro sanitario, garantiza la aplicación del Sistema de Gestión de Calidad en el mismo, mejorando la seguridad del personal y, por supuesto, la de los pacientes.